Por fin, después de un tiempo sin actualizar
el blog tengo un rato para sentarme y contaros más sobre mi escapada de Semana
Santa.
¿Qué es eso de que Teruel no existe? Tengo
que desmentirlo: sí que existe ¡y es una ciudad encantadora! Confieso que las
dos razones por las que elegí visitar Teruel esta Semana Santa fue porque quería
visitar Dinópolis y porque el bus
era más barato y salía desde Alcalá de Henares jejeje. También porque es una
ciudad de la que no se habla mucho y ya me picaba la curiosidad.
Cuando llegamos lo primero que hicimos fue ir
a Dinópolis, y al final del día, ir al hotel (Hotel Civera, podéis leer la reseña aquí) y a ver unas procesiones. Tras cruzar el Viaducto Fernando Hue de la
Barrera tuvimos el primer contacto con la belleza
nocturna turolense al ver la plaza de San Juan, donde se encuentra el Casino
Turolense.
Paseamos hasta encontrarnos de casualidad con
la Plaza del
Torico, ya que no íbamos guiándonos con ningún mapa esa noche. Así de
bonita nos la encontramos iluminada. Cenamos en el Bar Rokelin donde aunque
tardaron mucho en atendernos (no porque hubiera mucha gente, pero estaban
trajinando y no nos hacían caso) se comía bastante bien y a buen precio. A
nosotras nos costó 9,70€ un par de buenos bocatas con la bebida. Esa noche
vimos las procesiones y la plaza de la Catedral,
pero el cansancio nos pudo y volvimos al hotel.
Al día siguiente con las fuerzas renovadas
empezamos a patearnos Teruel. Por la noche entreví una escalinata bastante
impresionante y eso fue lo primero que busqué en el plano. Llegamos hasta ella:
la Escalinata Neomudéjar de 1920,
construida con el fin de unir la estación con la ciudad. Merece la pena bajarse
los escalones para contemplarla entera. Al lado de la escalinata está la
oficina de turismo, y subiendo por el paseo
del Óvalo se llega al casco histórico.
Pasamos por debajo de la Torre mudéjar de El Salvador, a la que no
llegamos a subir porque preferimos invertir el dinero en otra torre de la que
luego os hablaré. A la de El Salvador se puede subir por 2,50€.
Hasta llegar a la Catedral pasamos por el
convento de Santa Teresa y por el Ayuntamiento,
construido en un llamativo color amarillo. La Catedral de Santa María de la Mediavilla posee
una de las torres mudéjares de Teruel, y es una obra arquitectónica muy rica
debido a que ha ido modificándose durante 8 siglos.
Paseamos hasta llegar al Portal de San Miguel, desde donde ya se veían los restos de la
muralla y el Acueducto-Viaducto de los
Arcos, del que se traía agua desde la Peña del Macho. El acueducto me pareció bonito,
sin embargo la zona que pasa por debajo estaba muy descuidada y afeaba mucho
este monumento. Cruzamos al otro lado del acueducto para contemplar la ciudad
desde ahí y curiosear la Torre Iglesia de la Merced. Luego recorrimos la Ronda Dámaso Torán y la Ronda de Ambeles, ya que por
esas calles (avenidas que rodean el casco histórico) teníamos buenas vistas de
los torreones de la
Lombardera, del Rincón y de Ambeles.
En esa zona está la estación de autobuses, en la que no recomiendo pasar mucho tiempo…
Ni poco, a ser posible. Yo pasé un momento a usar los aseos y compartí baño con
una cucaracha :( Me faltó poco para salir corriendo con el culo al aire por
ahí…
Después de ver los torreones decidimos visitar el Conjunto de los Amantes. Recomiendo coger la entrada que incluye la visita guiada al Mausoleo, Iglesia de San Pedro, claustro, ábside, torre y ándito, que cuesta 9€. Si tuviera que elegir una de estas cosas me quedaría quizás con la de la Iglesia (5€) porque es una auténtica obra de arte. Su interior fue reformado debido a la caída de un rayo en la torre. Lo que más me llamó la atención es que el órgano de tubos fue dañado y ya no está, sin embargo sí queda el hueco donde estaba, no han quitado la estructura de madera (como os muestro en la foto de aquí abajo ↓).
En el Museo
de los Amantes puedes aprender su historia, una historia de un amor
frustrado que se ve perfectamente reflejado en las esculturas que contienen sus
cuerpos, que tienen las manos a punto de rozarse.
Cuando acabamos la visita al museo salimos a
la calle a seguir conociendo Teruel. Nos fuimos fijando en lo que nos había
comentado la guía de la
Iglesia de San Pedro: uno de los materiales que más abundaba
era el hierro, sobre todo en los enrejados de los balcones. La mayoría de los
edificios con estos enrejados forman parte de la ruta de edificios modernistas, ruta que se hace “sin querer” ya que te vas
tropezando con estas casas por las diferentes callejuelas y plazas, lo que
contrasta con la arquitectura mudéjar predominante en Teruel.
Nos quedó por visitar el Museo Provincial que estaba reabierto recientemente y que es gratis, pero preferí pasear aprovechando que no llovía. Por lo demás, creo que hicimos una buena visita.
Por último, voy con los agradecimientos. Gracias
a Turismo de Teruel que me ha facilitado mucha información y planos,
enviándomelos a casa para que pudiera preparar mejor mi visita. Gracias a
Francisco Javier del blog Lagarto Rojo y a Notas en mi libreta viajera que me han provisto de información a través de sus blogs o por mail
:) Gracias a todos.
Espero poder actualizar un poco más
frecuentemente… De momento, ¡feliz domingo y feliz semana! ¡Un abrazo viajeros!
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Es una ciudad muy pequeñita pero tiene muchas cosas para ver, a mí me gustó mucho.
ResponderEliminarUn besito.
Síiii menos el puente ese que tuvimos que cruzar mil veces jejeje. Un besito
Eliminar¡Teruel exite! Es una ciudad que nos encanta, muy pequeñita pero llena de atractivos.
ResponderEliminarPues sí, he podido descubrir por mí misma que existe :) Y que es pequeñita pero matona. Gracias por vuestro comentario! Un abrazo!
EliminarPues yo siempre he tenido ganas de ir a Teruel y alrededores. Cuando vaya por allí te releeré de nuevo :-)
ResponderEliminarMuy bonito el edificio modernista, me encanta ese estilo. Un saludito :-)
Pues hay unos cuantos! Espero que te sirva de algo mi modesta información de Teruel si vas por allí jejeje. Un abrazo!!! :)
EliminarPues no está nada mal Teruel!!! Y qué combinación de estilos, no? Tiene que ser chocante ver edificios modernistas con los mudéjar!! Saludos
ResponderEliminarwww.locosxlosviajes.com
Sí, es una bonita combinación de estilos, imposible aburrirse! :) Un saludo!
EliminarEs hermoso. Me encanta.
ResponderEliminarGracias por tu comentario, me alegra que te guste :)
EliminarLa conozco y es preciosa, tranquila y con mucho que ver. La provincia no es para menos, por ejemplo Albarracín, está muy cerca de Teruel y es un pueblo que te traslada en el tiempo. Las fotografías muy bonitas. Saludos!!
ResponderEliminarEstoy totalmente de acuerdo. Visité también Albarracín y quedé encantada. Deberían promocionar más Teruel porque hay muchas cosas que ver y es la gran olvidada. Un saludo y gracias por tu comentario! :)
Eliminarmuy interesante, muy bonito y presentado de una manera preciosa y apetecible. Gracias por compartir
ResponderEliminarMuchas gracias por tus elogios Guillermo! Me alegra mucho que te haya gustado. De nada por compartir, un placer ;) Saludos!
EliminarA mí siempre me ha gustado Teruel, está a una hora de mi casa así que cuando vivía allí íbamos siempre a pasar el día y a comprar jamón ;)
ResponderEliminarLa arquitectura es una preciosidad, totalmente recomendable perderse por allí.
Saludos
Hola Elena! Qué bien suena eso de ir allí a pasar el día y a comprar jamón jejeje, rico rico! Yo volveré algún día por tierras turolenses a seguir conociéndolas. Un saludo y gracias por tu comentario!
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