Cuando hace unos años visité Aranda de Duero, no tenía ni la más
remota idea de que acabaría volviendo para participar en el Certamen de Bandas de Música que allí
se celebra. Concretamente, voy con la Banda Sinfónica Complutense de Alcalá de Henares a tocar allí el próximo 3 de
julio, en la XVI edición del certamen.
Maqueta de Aranda de Duero
Aunque ya participé en uno en Cullera (del que salimos muy bien parados, por cierto) este certamen es
diferente y con una particularidad que me resulta curiosa: el público también vota. Según he visto en vídeos de otros
concursos pasados, se reparten tarjetas en las que la gente valora del 1 al 10
la actuación de la banda. Así que si estás por allí, viajero, vecino o curioso,
te animo a que vengas a escucharnos este fin de semana y a valorar nuestro
concierto. También puedes ver a otras 6 bandas, 5 de ellas de España y una de
Portugal, a lo largo de los viernes de julio y agosto.
Una vez dedicado esta parrafada a
una de las partes del título (que ha sido fundamental para recordarme que aún
no había escrito sobre Aranda), voy a continuar con la otra: el vino. Y es que esta villa de la
provincia de Burgos tiene tanto encanto por arriba como por abajo. Me explico.
El subsuelo de Aranda de Duero
está surcado de galerías destinadas a la elaboración y almacenamiento del vino
(llegó a haber unas 300 bodegas subterráneas), y pude conocer un poco más sobre
el tema gracias a una visita guiada gratuita a la Bodega de las Ánimas. Si vais por allí, preguntad en la oficina de turismo
que es de donde salen los grupos.
La visita comienza en una sala donde
hay paneles informativos y diversas maquetas de la ciudad. Así fue como
aprendí que las bodegas de familia media estándar más antiguas datan del siglo
XII y XIII, ¡casi nada! Después pasamos a ver lo que serían las galerías de las bodegas, con
recreaciones de diferentes actividades y trabajos relacionados con el vino en
Aranda.
Las cubas que se usaban para
guardar los vinos eran de una capacidad inmensa: de 3.000 a 5.000 litros (como las que veis en las recreaciones de las
fotos). Las bodegas se comunicaban entre sí, y no solían coincidir con los
límites de las casas. Como curiosidad,
se evitaba construir galerías bajo las iglesias, ya que su estructura es muy
pesada y había miedo de que cediera el
terreno.
No quiero desvelaros más sobre la
visita, es mejor que os acerquéis a conocer vosotros mismos las bodegas, y si
podéis degustéis algún vino de la Ribera del Duero. Volvemos a la superficie de
Aranda para conocer algunos de los puntos de interés turístico.
- Plaza Mayor: no me pareció especialmente atractiva, pero os recomiendo dar un paseo por allí y pasar por la oficina de turismo.
- Iglesia de Santa María la Real: solo la pude ver por fuera, pero bastó para que me conquistara. La iglesia, del siglo XV, tiene una torre que formaba parte del sistema defensivo de Aranda de Duero.
- Museo Sacro: situado en la antigua iglesia de San Juan Bautista, es un lugar donde el público puede contemplar el patrimonio de la diócesis de Aranda. Además de este museo podemos ver el de Esculturas al Aire Libre, el Museo del Ferrocarril o el de Cerámica.
Antes de acabar, os informo que
la zona centro de Aranda de Duero es de estacionamiento regulado, por lo que es
recomendable aparcar un poco en las afueras para ahorrarse el dinero y el mover
el coche cada dos horas, que es un rollo. Además, os dejo un vídeo resumen de
la visita que quizás os resulte más atractivo que todo lo que he escrito :)
Si sois de Madrid tal vez os
interese hacer la ruta que hice yo, pasando también por Riaza (creo que pasé a
la vuelta de Aranda).
¿Qué os ha parecido? ¿Conocéis
Aranda de Duero? ¿Habéis visitado sus bodegas? ¡Contadme! Os deseo una
estupenda semana, ¡nos leemos! Te recuerdo que me puedes seguir en Facebook, Twitter, Instagram y Youtube si no lo haces ya, y si te ha gustado el post, te animo a que lo compartas en las redes sociales.
No veo nada del famoso lechazo de Aranda de Duero! ¿Lo probaste? (Perfecto acompañamiento para el vino...jeje) Si no, el día 3 te toca probarlo!! Saludos!
ResponderEliminarEs que no lo he probado :'( con lo bien que suena jejeje. Tendré que volver solo a comer a Aranda!!
EliminarMira que he pasado veces al lado de Aranda de Duero de camino a otro sitio y siempre me digo, la próxima vez paro... pero la verdad es que nunca lo he visitado y tengo ganas, sobre todo por su famoso lechazo. Lástima que este finde no pueda acercarme para ir a verte actuar! Suerte!!
ResponderEliminarUn abrazo
Está muy bien el sitio, sobre todo para ir a probar vinitos y morcilla jejeje. Si un día tienes tiempo, escápate que está bien para ir y venir en el día. Un abrazo y gracias por la suerte! (hasta septiembre no dicen resultados...)
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