07 marzo 2017

24 horas en las Fallas de Valencia

La primera y única vez que pude ir a las Fallas fue en 2010, y por fin el año pasado pude volver. Si la otra vez fue una escapada exprés, esta vez no iba a ser menos. ¿Quieres saber cómo aprovechar si solo tienes 24 horas para disfrutar de las Fallas? ¡No te pierdas este post!
  • Nota: las fotografías son todas de las Fallas de Valencia 2016



La primera opción es la que yo hice en 2010, que fui en la cremá, la noche en la que las fallas pasan a ser pasto de las llamas y que puedes leer en este post de hace unos añosLa segunda opción, que yo casi la disfruté más, es ir el penúltimo día para disfrutar de la Nit del Foc y de la última mascletá de la temporada. Os cuento qué hacer si elegís esta segunda recomendación.



Salimos temprano por la mañana desde Madrid, y llegamos al mediodía al centro de Valencia. Aparcamos un pelín retirado del centro porque sino, no hay quien aparque. Comimos un bocadillo previamente hecho con amor y cariño en casa, y así no perdíamos tiempo en buscar dónde comer.



Tuvimos unas horitas para contemplar y fotografiar las fallas que encontrábamos por cada rincón. Hay que tener cuidado, porque las aglomeraciones de gente y los petardos son una combinación peligrosa… Si te agobias fácilmente y no te gusta el ruido y la pirotecnia, esto no es para ti. Sé que parece una recomendación obvia, pero hay gente que a pesar de todo se empeña en ir a las fallas y lo pasa realmente mal. Tal vez, en ese caso, te recomendaría ir los primeros días que habrá menos gentío.



Después de hartarnos a ver los ninots y de esquivar algún que otro petardo nos fuimos a ver el desfile de la Ofrenda, un pasacalles donde las comisiones falleras peregrinan junto a sus bandas de música para acabar dejando las flores en el manto de su patrona, la Virgen de los Desamparados. Al acabar la ofrenda, la Virgen luce un precioso vestido realizado con las flores que la gente ha ido llevando.



A final de la tarde la cosa se puso un poco fea porque nos empezó a llover y nos mojamos un poco, pero por suerte la cosa no fue a más y por la noche paró. Buscamos un sitio donde cenar (algo alejado del centro) y, una vez con el estómago lleno, fuimos a la zona donde unas horas más tarde tendría lugar el espectáculo de la Nit del Foc, en la zona de la Alameda a la 1:30 de la madrugada.



El castillo de fuegos artificiales es un gran reclamo turístico, por lo que te recomiendo que te armes de paciencia y vayas con tiempo para coger sitio. Llévate las cartas, crucigramas, un libro y pipas porque te dará tiempo a hartarte de jugar, acabar los crucigramas, el libro y las pipas. El espectáculo merece la pena aunque, repito, hay que tener mucha paciencia. En este caso, el año pasado tuvimos la mala suerte de que además empezó con bastante retraso… Esperemos que este año no pase igual.





Una vez deslumbrados por los fuegos artificiales volvimos al coche. Como veréis, no he hablado nada de alojamientos en este post, y es que nuestro alojamiento fue el coche. Lo movimos hasta una zona apartada y con los sacos de dormir y los asientos de atrás plegados pudimos dormitar bastante decentemente. A la mañana siguiente dejamos el coche en una estación de Renfe cercana (no recuerdo cuál 😐) y fuimos al segundo ejercicio de paciencia de nuestro viaje a las Fallas: coger sitio para ver la última cremá.



A pesar de que era a las 14 horas, desde las 10 de la mañana la gente ya estaba cogiendo sitio. INCREÍBLE. Nosotros desayunamos, compramos unos aperitivos para la espera y cogimos sitio, eso sí, no sin antes plantearnos robar alguna silla de algún bar para que la espera fuera más cómoda 😁 También intentamos comprarla, pero no hubo manera. La próxima vez iremos mejor preparados, ¡prometido!

La espera fue un poco eterna, a pesar de que llevaba los crucigramas y un cuaderno para entretenerme. Sabiendo que la gente está ahí más de tres horas antes de la mascletá (si quieres coger buen sitio) no sé cómo no hacen algún pasacalles o algo que amenice la espera… Ahí lo dejo jejeje. A las 14 horas comenzó lo más ruidoso que he oído en mi vida, pero que con los oídos medio tapados es soportable e impresionante.

Así se cumplían las 24 horas en las Fallas de Valencia, y con ellas nuestra estancia en estas fiestas. Había sido poco tiempo pero bien aprovechado, ¿no crees? ¿Tú has estado en las Fallas? Me encantaría saber tu experiencia :) ¡Cuéntame!

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1 comentario :

  1. Hola Arantxa! No conozco Valencia, tengo muchas ganas de ir. Las fallas me parecen impresionantes, un saludo!!!!!

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